11 de Junio – Bolsas de plata – Nuestro Pan Diario Para Niños
Bolsas de plata 11 DE JUNIO Después de mucho tiempo, el amo regresó de su viaje y los llamó la…
Bolsas de plata
11
DE JUNIO
Después de mucho tiempo, el amo regresó de su viaje y los llamó la sus siervos] para que rindieran cuentas de cómo habían usado su dinero. El siervo al cual le había confiado las cinco bolsas de plata se presentó con cinco más y dijo:
«Amo, usted me dio cinco bolsas de plata para invertir, y he ganado cinco más».
MATEO 25:19-20 NTV
Un hombre rico se fue de viaje, pero antes de partir, les pidió a sus siervos que cuidaran sus pertenencias. Les dio a tres de sus siervos algo de dinero para usar.
El primer siervo recibió cinco bolsas de plata, el segundo recibió dos bolsas y el tercero, una bolsa.
Mientras el hombre rico estaba de viaje, los siervos manejaron el dinero de distintas maneras. El primero usó sus cinco bolsas de plata para ganar otras cinco. El segundo usó sus dos bolsas para ganar dos más. Pero el tercer siervo enterró su bolsa de plata y la escondió.
Cuando el hombre rico regresó, les preguntó a sus siervos qué habían hecho con el dinero. El primero y el segundo siervo le dijeron que habían ganado más dinero. Tenían el doble de lo que les había entregado.
Entonces, el amo dijo: «Bien hecho. Son buenos siervos y puedo confiar en ustedes».
Pero cuando se enteró de que el tercer siervo había escondido el dinero, el amo dijo:
«¡Eres un siervo malo y perezoso!». Entonces, lo echó de su casa.
Jesús usó esta historia para ayudarnos a entender que Dios nos da a cada uno dones para usar para su gloria. No quiere que escondamos nuestros dones y talentos, como el siervo que enterró su bolsa de plata en el suelo. No importa cuán grande o pequeño parezca tu talento. Para Dios, todos son importantes.
Quiere usar tus talentos para ayudar a otros y honrarlo a Él. -TM
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Lee Romanos 12:6-8.
¿Qué dice sobre usar tus propias habilidades especiales?
DATO DIVERTIDO
Algunas versiones de la Biblia llaman «talentos» a las bolsas de plata. Un talento era muchísimo dinero. En la época de Jesús, ¡era lo que un obrero ganaba en 20 años!
