Me imagino que conoces la historia de José, que se encuentra en el libro de Génesis en la Biblia. José es un personaje destacado por su total fidelidad a Dios. Hoy, analizaremos cómo llegó a ser gobernador de Egipto. Normalmente, todos pensamos que para ser felices e importantes todo tiene que salir bien, pero la historia de José es totalmente contraria a este pensamiento. Así que, si te sientes triste por algo que no va bien en tu vida, déjame que te cuente algunas cosas de la vida de José:
Su mamá murió cuando él era pequeño, al dar a luz a su hermanito.
En su infancia, su padre lo sobreprotegió y lo mimó. Por eso, sus hermanos lo envidiaban y odiaban.
Sus hermanos lo rechazaron, lo traicionaron y lo vendieron a unos extranjeros.
Luego llegó a vivir a un país extranjero donde no estaba su papá ni nadie conocido y tampoco se hablaba su idioma. En ese lugar fue un esclavo.
Fue tentado a hacer algo malo, pero él se negó por su fidelidad a Dios. Tristemente, fue acusado injustamente y pasó dos años en la cárcel por un delito que no había cometido.
Si miras su vida hasta aquí, podríamos pensar que después de todas estas cosas tan tristes que vivió pudo haber sido un hombre malo, delincuente, resentido.