28 de Abril – Dejar el hogar – Nuestro Pan Diario Para Niños

En Genesis, Leemos la historia de un hombre llamado Abram, a quien después le cambiaron el nombre a Abraham. Un día, Dios le dijo a Abram que se fuera de la tierra donde vivía. No le dijo adónde ir, sino que llevaría a Abram a otro lugar.

Abram no hizo ninguna pregunta. No discutió con Dios ni le dijo que no quería ir. Simplemente, empacó todo y obedeció. Se llevó a su esposa Sarai y a su sobrino Lot, y a todos sus siervos, y viajaron a un lugar llamado

Siquem, en la tierra de Canaán. Mientras estaban allí, Dios le prometió a Abram que, un día, les daría esa tierra a sus descendientes. Entonces, Abram construyó un altar a Dios y lo adoró.

¿Alguna vez tuviste que mudarte a otro lugar? A veces, las familias tienen que mudarse dentro de la ciudad, o incluso a otro país. Las personas pueden cambiar de iglesia o de escuela; hay muchas razones para mudarse. Quizá quieran estar más cerca le amigos o parientes, o quieran un nuevo trabajo o una casa distinta. Mudarse a otro lugar puede ser emocionante, pero también puede dar miedo. Así que, si alguna vez cienes que mudarte, recuerda la historia de Abram. Tal vez no entiendas por qué tienes que mudarte, pero Dios puede tener algo muy bueno para ti en el lugar nuevo. —TM