¿Qué recibes cuando das bondad? Más bondad. Es una ley. Los bondadosos reciben como respuesta más bondad.
Un antiguo historiador llamado Apiano describió en su libro Maravillas de Egipto un incidente que él mismo presenció en la ciudad de Roma, en los días de Julio César. Ocurrió en el inmenso Coliseo romano, donde las multitudes se divertían con crueles batallas entre fieras y humanos. Un día fue traído desde el norte de África un esclavo condenado a muerte. El show consistiría en ver la lucha entre el esclavo y un hambriento león.
El esclavo esperaba temblando su fatal desenlace. Finalmente, se liberó al león para así iniciar el espectáculo. Grande fue la sorpresa de todos cuando el león, lejos de atacar al pobre esclavo, se detuvo, como observándolo, y luego mansamente se acercó y comenzó a lamerle las manos y los pies.
Julio César, maravillado por la escena, mandó a llamar al esclavo. Se le preguntó su nombre y la razón del comportamiento del león. Él contestó que se llamaba Androcles y contó que luego de haber huido de su cruel amo, se escondió en una cueva del desierto. Cierto día, entró allí cojeando un león. Por sus gemidos y la sangre que le corría por la pata, se notaba que le dolía mucho. El león extendió su pata, y Androcles pudo ver que tenía clavada una enorme espina. Con cautela, le sacó la espina y, luego de eso, el león durmió tranquilamente. Androcles vagó