- abril 14, 2024
Domingo 14 de abril – LA TRANSIGENCIA: LA SUTIL ESTRATEGIA DE SATANÁS – LA LUZ BRILLA EN LA OSCURIDAD
LA LUZ BRILLA EN LA OSCURIDAD
“Entonces Jesús les dijo: ‘Aún por un poco de tiempo la luz estará entre ustedes. Anden mientras tienen luz, para que no los sorprendan las tinieblas; porque el que anda en tinieblas no sabe adonde va’ ” (Juan 12:35).
Domingo: 14 de abril
LA TRANSIGENCIA: LA SUTIL ESTRATEGIA DE SATANÁS
Compara Juan 14:6 con 8:44. ¿Qué contraste entre el carácter de Jesús y el de Satanás se observa en estos dos pasajes?
Juan 14:6
6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Juan 8:44
44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.
Lo que Jesús dice es verdad, porque él es el Autor de la verdad. La verdad procede del corazón de un Dios que todo lo sabe, todo lo ama y todo lo conoce. Él es el fundamento de la realidad y de toda verdad.
Al contrario, Satanás es un mentiroso y el padre de la mentira. Está dispuesto a utilizar la mentira, el engaño, la desinformación y la distorsión de la verdad para descarriar al pueblo de Dios. Engañó a Eva en el Edén distorsionando la verdad, creando dudas y negando descaradamente lo que Dios dijo. La afirmación de Satanás, “no morirán”, en el contexto de comer el fruto, era una clara contradicción de lo que Dios había anunciado. A lo largo de los siglos, Satanás ha utilizado la misma estrategia. Socava la confianza en la Palabra de Dios, contradice la voluntad revelada de Dios, distorsiona las Escrituras y, a veces, cita erróneamente la Biblia, si le conviene.
Lee Proverbios 23:23; y Juan 17:17 y 8:32. ¿Qué similitudes ves en estos pasajes bíblicos respecto de la verdad de la Palabra de Dios? ¿Cuál es su mensaje central?
Proverbios 23:23
23 Compra la verdad, y no la vendas; La sabiduría, la enseñanza y la inteligencia.
Juan 17:17
17 Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.
Juan 8:32
32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
“Bien sabía Satanás que las Santas Escrituras capacitarían a los hombres para discernir los engaños de él y oponerse a su poder. Fue por medio de la Palabra que el mismo Salvador del mundo resistió los ataques del tentador. A cada asalto suyo, Cristo presentaba el escudo de la verdad eterna y decía: ‘Escrito está’. A cada sugerencia del adversario oponía él la sabiduría y el poder de la Palabra. Para mantener su poder sobre los hombres y establecer la autoridad del usurpador papal, Satanás necesita que ellos ignoren las Escrituras. La Biblia ensalza a Dios y coloca a los finitos seres humanos en su verdadero sitio; por consiguiente, hay que esconder y suprimir sus verdades sagradas. Esta fue la lógica adoptada por la Iglesia Romana. Por centenares de años fue prohibida la circulación de la Biblia. No se permitía a la gente que la leyese ni que la tuviera en su casa, y sacerdotes y prelados sin principios interpretaban las enseñanzas de ella para sostener sus pretensiones. Así fue como el Papa vino a ser reconocido casi universalmente como vicegerente de Dios en la Tierra, dotado de autoridad sobre la Iglesia y el Estado” (Elena de White, El conflicto de los siglos, p. 55).
Analiza las formas en que Satanás intenta distorsionar o malinterpretar la Palabra de Dios en la actualidad.
Comentarios Elena G.W
Cristo es el Autor de toda verdad. Toda concepción brillante, todo pensamiento de sabiduría, toda capacidad y talento, son dones de Cristo. El no tomó ideas nuevas de la humanidad, porque es el originador de todo. Pero cuando vino al mundo, encontró las brillantes gemas de verdad que había confiado al hombre sepultadas en la superstición y la tradición. Las verdades de la importancia más vital estaban colocadas en el marco del error para servir al propósito del archiengañador… Pero Cristo barrió las teorías erróneas. Nadie, salvo el Redentor del mundo, tenía poder de presentar la verdad en su pureza primitiva, desprovista del error que Satanás había acumulado para ocultar su belleza celestial…
La obra de Cristo consistió en tomar la verdad… y separarla del error para presentarla libre de las supersticiones del mundo a fin de que la gente la aceptara por su propio mérito intrínseco y eterno. Dispersó la niebla de la duda para que la verdad pudiera ser revelada y arrojara rayos luminosos en las tinieblas de los corazones de los hombres (A fin de conocerle, 20 de julio, p. 207).
Satanás está concentrando todas sus energías para ligar vuestra voluntad a la suya, para hacer de vosotros sus instrumentos para oponerse a los planes de Dios, para que no permitáis que Cristo reine sobre vosotros. Aunque sabéis que «de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna», Satanás… procurará conduciros lejos de Cristo, para que os transforméis en instrumentos suyos a fin de apartar a otros también, para frustrar de ese modo el plan de Dios. Es el padre de la mentira, y extiende una red de falsedades en la que os ata a su servicio con cuerdas de engaño. Mientras más inteligentes y atractivos seáis, más arduamente trabajará para persuadiros a poner vuestros talentos a sus pies, y a ayudaros a cumplir sus fines de alistar a otros bajo su negra bandera… Satanás es el fascinador, y él ha obrado para que Cristo sea rechazado del alma, con el propósito de ocupar su lugar.
Os ruego, hijos e hijas, que rompáis el embrujo del maligno. Huid a Jesús en procura de auxilio y aferraos de la vida eterna (Hijos e hijas de Dios, 25 de noviembre, p. 338).
La influencia transformadora de la verdad santifica el alma… El amor de Cristo, manifestado en su gran sacrificio para salvar a la raza humana, derriba todas las barreras. El amor de Dios fluye en el alma y la gratitud emana del corazón que anteriormente era duro como el pedernal. Cristo crucificado, Cristo nuestra justicia, conquista el corazón y lo lleva al arrepentimiento. Esto es tan sencillo que incluso un niño lo puede entender. Los sabios y los eruditos se sienten fascinados al contemplar la profundidad de esta sabiduría, de este amor y de este poder insondables. Queremos presentar esta preciosa verdad a la gente que se encuentra encadenada por el pecado, y que todos puedan ver que Cristo fue sacrificado por nuestras transgresiones, y que desea salvarnos…
Hemos de imbuirnos de un profundo y perdurable sentido del valor, la santidad y la autoridad de la verdad (Mi vida hoy, 18 de septiembre, p. 269).