Agosto 25 – CUBRO AL DESNUDO – Mi Vida Hoy

Cristo…dice: Yo fui quien tuvo hambre y sed. Yo fui quien anduvo como extraño. Yo fui el enfermo. Yo estuve en la cárcel. .. . Mientras llenabais vuestros guardarropas con ricos atavíos, yo estaba en la indigencia. Mientras buscabais vuestros placeres, yo languidecía en la cárcel.

Cuando concedíais la pitanza de pan al pobre hambriento, cuando les dabais esas delgadas ropas para protegerse de la mordiente escarcha, ¿recordasteis que estabais dando al Señor de la gloria? Todos los días de vuestra vida yo estuve cerca de vosotros en la persona de aquellos afligidos, pero no me buscasteis. No trabasteis compañerismo conmigo. (DTG:578-579)

Entre los que profesan ser cristianos se gasta en pródigos lujos, joyas y ornamentos, lo suficiente como para satisfacer las necesidades de todos los hambrientos y vestir a todos los desnudos de nuestros pueblos y ciudades; y eso sin que ninguno de los profesos seguidores del manso y humilde Jesús necesite privarse de alimento conveniente ni de la abrigada ropa. ¿Qué dirán esos miembros de iglesia en el día de Dios cuando los enfrenten con los pobres dignos, los afligidos, viudas y huérfanos que conocieron la más angustiosa necesidad, mientras los profesos seguidores de Cristo gastaban en ropa superflua y en adornos innecesarios proscritos por la Palabra de Dios lo que hubiera alcanzado para suplir las necesidades de los primeros? (RH, 21-11-1873)

En el Capítulo 58 de Isaías se define claramente la obra que debe hacer el pueblo de Dios, según el plan de Cristo. Deben romper todo yugo, deben dar de comer al hambriento y cubrir al desnudo…Si cumplen los principios de la ley de Dios mediante actos de misericordia y amor están representando el carácter de Dios ante el mundo, y recibirán las más ricas bendiciones del Cielo. (RH, 20-08-1895) (249)