Viernes 11 de octubre – PARA ESTUDIAR Y MEDITAR – SIGNOS DE DIVINIDAD

SIGNOS DE DIVINIDAD “Jesús respondió: ‘Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá.…

 Viernes 11 de octubre – PARA ESTUDIAR Y MEDITAR – SIGNOS DE DIVINIDAD

SIGNOS DE DIVINIDAD

“Jesús respondió: ‘Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá. Todo el que vive y cree en mí no morirá para siempre. ¿Crees esto?’ ” (Juan 11:25, 26).

Viernes: 11 de octubre

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:

Lee en El Deseado de todas las gentes, de Elena G. de White, los capítulos “La crisis en Galilea” (pp. 347-359), “Lázaro, ven fuera” (pp. 482-494) y “Conspiraciones sacerdotales” (pp. 495-500).

“La vida de Cristo, que da vida al mundo, está en su palabra. Fue por medio de su palabra como Jesús sanó la enfermedad y echó los demonios; por su palabra calmó el mar y resucitó a los muertos; y la gente dio testimonio de que su palabra era con poder. Él hablaba la palabra de Dios, como había hablado por medio de todos los profetas y los maestros del Antiguo Testamento. Toda la Biblia es una manifestación de Cristo, y el Salvador deseaba fijar la fe de sus seguidores en la Palabra. Cuando su presencia visible se hubiese retirado, la Palabra debía ser la fuente de poder para ellos. Como su Maestro, habían de vivir ‘de toda palabra que sale de la boca de Dios’ (Mat. 4:4).

“Así como nuestra vida física es sostenida por el alimento, nuestra vida espiritual es sostenida por la palabra de Dios. Y cada alma ha de recibir vida de la palabra de Dios para sí. Así como debemos comer por nosotros mismos a fin de recibir nutrimento, así hemos de recibir la Palabra por nosotros mismos. No debemos simplemente obtenerla por medio de otra mente. Debemos estudiar cuidadosamente la Biblia, pidiendo a Dios la ayuda del Espíritu Santo a fin de comprender su palabra” (Elena G. de White, El Deseado de todas las gentes, pp. 354, 355).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

  1. Esta semana vimos a Jesús alimentando a los cinco mil, sanando a un hombre ciego de nacimiento y resucitando a Lázaro. En cada caso, Jesús proporcionó una poderosa evidencia de su divinidad. Sin embargo, estos milagros, por asombrosos que fueran, crearon división. Algunos respondieron con fe; otros, con duda. ¿Qué nos enseña esto acerca de cómo, incluso frente a poderosas evidencias, las personas pueden elegir rechazar a Dios?

  2. Todos estos relatos señalan a Cristo como el Hijo divino de Dios. ¿Por qué su divinidad es tan importante para la fe en Jesús como Salvador?

  3. Vuelve a leer 1 Corintios 1:26 al 29. ¿De qué manera vemos este mismo principio en acción en el siglo XXI?

  4. ¿Cuáles son algunas de las cosas “insensatas” que creen los cristianos y de las que los “sabios según la carne” se burlan y rechazan? ¿Qué creemos nosotros que también “avergüenza” a los “poderosos”?

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *